Fue director de Sobremesa
Rafael Chirbes, adiós a un genio con muy buen gusto

El pasado sábado la literatura española perdió a uno de sus últimos genios, el escritor Rafael Chirbes, un brillante literato que deja tras de sí un excelente legado de ensayos y novelas, la última, la aclamada “En la orilla”. Redacción Sobremesa. Imagen: Yves Tennevin (CC)
El pasado sábado el mundo literario se conmocionaba con la repentina muerte, a los 66 años de edad, de Rafael Chirbes, uno de los escritores más aclamados del panorama cultural español. Chirbes, nacido en Tabernes de Valldigna (Valencia), falleció de un cáncer de pulmón en su casa, dejando tras de sí una vida que dedicó por entero a su gran pasión, la cultura y la creación literaria.
Ya desde bien pequeño mantuvo una estrecha relación con la escritura, a base de anotar en cuadernos desde notas literarias a críticas de películas, un comienzo que ya no abandonaría nunca, pese a haberse dedicado a otras tareas entretanto, como la enseñanza o el periodismo, que ejerció brillantemente desde las páginas de Sobremesa.
Chirbes estudió Historia en Madrid y fue tras conocer al profesor Carlos Blanco Aguinaga como encarrilaría su vida hacia la literatura, abandonando la que fue su formación. Ejerció diversos oficios siempre relacionados con los libros y la cultura, fue librero, aunque pronto comenzaría a escribir columnas y artículos en revistas como Sal y Pimienta u Ozono.
Pasó un tiempo viviendo en Marruecos en los 80, donde ejerció de profesor de español, y allí gestaría la que fue su primera novela, Mimoum (1988), teñida de existencialismo.
Por esa época, en 1984, nacía también Sobremesa, revista decana de la gastronomía y el vino en España, y de la que Chirbes fue uno de sus primeros directores. Era este un momento en el que comenzaba una etapa brillante del periodismo gastronómico y vinícola, donde Chirbes tuvo un papel relevante, escribiendo artículos sobre vinos franceses que fueron pioneros en el sector y contando con algunas de las plumas más brillantes de panorama literario- gastronómico del país. Hoy, el equipo de la revista, con Massimo Galimberti a la cabeza, lamenta profundamente la pérdida del que fue uno de los testigos y protagonistas del nacimiento y crecimiento de la cabecera, que el año pasado cumplía la treintena.
Chirbes vivió también en Extremadura, en Valverde de Burguillos (Badajoz) y allí gestó algunas de sus novelas más importantes, como La Larga Marcha (1996) o La Caída de Madrid (2000). Muy poco amigo de los encuentros sociales, la última etapa de su vida la pasó en su tierra natal, donde escribió la que es su novela más conocida por el gran público, Crematorio (2007), que se convirtió en una exitosa serie televisiva sobre la especulación inmobiliaria, y la última que publicó en vida, En la orilla (2013), considerada por muchos una de sus obras maestras.