Lo que se cuece en...

Manila, visitando un paraíso asiático de raíces españolas

Viernes, 27 de Noviembre de 2015

Manila sigue avanzando sin perder el recuerdo de españoles y americanos que durante muchos años permanecieron en la isla. Una herencia hispana que se refleja en cada rincón de sus mercados, en sus escuelas, en sus calles... Alberto Granados

No se puede negar que la presencia española en Filipinas, y concretamente en Manila, ha perdurado en el tiempo. Aún, hoy en día, la mayoría de las abuelas siguen hablando castellano y hay ciertas palabras de nuestro idioma que se mantienen presentes en el tagalo, el idioma oficial filipino. Aquí todavía se dice: cocina, cinturón, mesa, silla… y numerosas calles, plazas, apellidos o lugares históricos están arraigados a la cultura española, la que perduró durante más de 300 años en la isla. Esa presencia también se hace evidente en [Img #8934]su gastronomía, plagada de platos que a cualquier español le resultarán familiares como la paella, las calderetas o el lechón (nuestro cochinillo), que cocinan con una maestría inigualable. En Filipinas lo preparan generalmente asado, con la corteza bien crujiente y el interior jugoso, es una delicia de plato que en nada tiene que envidiar a nuestros famosos asados segovianos (aunque aquí no se utiliza apenas el cochinillo lechal) y que suele servirse fundamentalmente en banquetes y en celebraciones familiares especiales.

 

De lo que no existe ninguna duda es que el alimento principal para un filipino es el arroz. Existen infinidad de variedades y se consume en desayunos, comidas o cenas. Da igual el plato que se prepare (dulce o salado), siempre llevará un acompañamiento de arroz. De hecho, a pocos kilómetros de Filipinas, encontramos desde 1960 el IRRI (Instituto Internacional de Investigación del Arroz) donde se guardan y analizan más de 127.000 tipos de granos de arroz diferentes, recolectados en todos los rincones del planeta.

 

[Img #8933]He de reconocer que cuando atravesé Manila me quedé realmente sorprendido, nada de lo que yo me imaginaba se ajustaba a la realidad. Yo pensé que me encontraría una ciudad de casitas bajas, repleta de vegetación tropical y niños corriendo descalzos por las calles y lo que descubrí fue muy diferente: una ciudad saturada de tráfico, humo y polución en la que los atascos son el padre nuestro diario (atravesar de lado a lado la ciudad puede llevarte varias horas), con grandes rascacielos y torres de edificios más habituales en ciudades europeas o americanas. También es cierto que al ser una ciudad tan grande (con una extensión parecida a la de Madrid, pero con el triple de habitantes), tenemos diversidad de paisajes y barriadas, desde los más “europeizados” con amplias avenidas y zonas comerciales repletas de lujosas tiendas a los más pobres de casas bajas, con aceras sin asfaltar y apenas luz eléctrica. Es otro de los contrastes de Manila, en pocos metros cuadrados encontramos la riqueza y la pobreza en una ciudad donde las desigualdades económicas son abismales. Aquí no existe clase media (o es minoritaria), aquí hay ricos ¡y muy ricos! Y pobres… ¡y muy pobres!

 

Pero si realmente queremos conocer “lo que se cuece” en esta ciudad hay que recorrer sus mercados y tiendas repletas de frutas tropicales con el coco como principal producto de exportación del país. Algo que sorprende (y mucho) a los visitantes es que el pescado que se vende permanece vivo chapoteando en grandes peceras, tú mismo lo pescas y te lo llevas... ¡Más fresco imposible!

 

Para conocer la auténtica Manila hay que salir a la calle y disfrutar de su gastronomía callejera (en cada esquina encontramos comida para llevar), porque otra cosa que distingue a este pueblo es que se pasa el día comiendo. A todas horas, sin descanso...


[Img #8928]Una vuelta por el Mercado

 

Adentrarse en el Farmers Market es toda una experiencia para los sentidos. Este mercado ubicado en el centro de Manila ofrece la mejor materia prima de la zona y aquí encontramos prácticamente todo el producto fresco que deseemos. Verduras, frutas espectaculares, carnes, pescados y mariscos frescos..., en un mercado donde la sonrisa de los vendedores te reconforta en cada puesto en el que te detienes a comprar. Sorprende la cantidad de frutas diferentes que encuentras, coloridas y apetecibles.

Calle General Araneta, Quezon City (Metro Manila).


 

[Img #8930]Un paseo en Jeepney…

 

Estos coloridos autobuses recorren las transitadas calles de Manila soltando ese humo negro característico de los vehículos antiguos, porque estos “minibuses-furgoneta”son la herencia que dejaron hace muchos años los norteamericanos en la isla, eran los transportes militares durante los años de la II Guerra Mundial y fueron abandonados por los soldados americanos tras su marcha. Los filipinos los transformaron ampliándolos para aumentar su capacidad y los decoraron a su antojo y es toda una aventura pasear por Manila a bordo de uno de ellos. No hay duda que es el transporte más barato de la isla.


 

 

 

 

Agenda

 

[Img #8929]Para comer bien

 

Gallery Vask

5/F Clipp Center,11th Avenue corner 39th Street

Tel.: +63 917 546 1673

El chef español “Chele” González ya es considerado como uno de los mejores cocineros de Manila y ha encumbrado a lo más alto el restaurante que dirige, el Gallery Vask. Este chef cántabro ha sabido combinar las dos cocinas, la asiática y la española, mezclando ingredientes y técnicas con un resultado increíble y la elegancia del servicio y la espectacularidad de su local, con unas vistas impresionantes al skyline de Manila, lo convierten en uno de los imprescindibles.

 

 

[Img #8926]Antonio’s

Purok 138, Barangay Neogan, Tagaytay City

Tel.: +63 917 899 2866

El restaurante Antonio’s bien merece una excursión. Se encuentra en la localidad de Tagaytay City, a unos 70 kilómetros de Manila. Este lujoso restaurante con unas impresionantes vistas a la naturaleza está regentado por el chef Tony Boy. Servicio de excepción donde se cuidan todos los detalles y uno de los mejores lechones (nuestro cochinillo) de la isla. 

 

 

[Img #8927]El Cirkulo

Arnaiz Avenue (Pasay Road)

Tel.: +632 810-8735, 810-2763

Si quiere tomar sangría, chorizo, jamón, paella o una copa de vino español éste es un buen restaurante. Lleva abierto en la capital filipina desde el año 1995 y está dirigido por el chef J. Gamboa, un apasionado de nuestro país. Aunque en la carta encontramos gambas al ajillo o queso manchego una de sus especialidades es el lechón asado, toda una delicia.

 

 

Churrería La Lola

Centro Comercial Power Plant Mall, Amorsolo Drive

Tel.: +63 915 412 9468

El chef catalán Pepe López ha tenido la idea de montar la “Churrería La Lola”, donde a diario se puede degustar un exquisito chocolate con churros recién fritos o incluso un vaso de una rica horchata. Pero no solo encontramos los clásicos churros dulces; el chef ha ido más allá y nos lo presenta en su versión salada, donde encontramos los churros con salsa brava o rellenos de queso manchego y cubiertos con jamón.

 

 

[Img #8931]Mecha Uma

Calle 25 con la 6ª Avenida (Bonifacio Global City, Taguig City)

Tel.: (02) 801 2770

Escondido en la esquina entre la calle 25 y la Sexta Avenida encontramos este elegante restaurante. Al frente de los fogones está el chef Bruce Ricketts que ha traído hasta la isla toda la inspiración japonesa de su cocina. Están muy disputados los asientos en barra, donde disfrutas de la cocina en directo del joven chef. Comer en este restaurante suele ser una sorpresa porque cambian mucho el menú dependiendo de los productos de mercado que armonizan con sus influencias japonesas. Una delicia el Sashimi de cuatro pescados, la Ostra, el Calamar a la plancha o la Vieira con salsa de gamba.

 

 

 

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.