Enoturismo en medio del mar
Resort Cliff Bay Madeira, seis estrellas en pleno Atlántico
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Cinco astros son los de este hotel ubicado a las afueras de Funchal, a orillas del mar. La sexta la aporta la guía Michelin a su restaurante Il Gallo d´Oro, sabiamente guiado por el excepcional chef Benoît Sinthon.
Claudia Navarro
El resort Cliff Bay, incluido dentro de la cadena portuguesa Porto Bay, es uno de los lugares donde cualquiera querría perderse, con su clima tropical atemperado por corrientes marinas frescas que permite gozar de una temperatura constante y moderada durante todo el año. El complejo está absolutamente orientado al descanso y el disfrute del cliente, con amplias piscinas; una de ellas climatizada y con acceso interior y exterior, varios jacuzzis exteriores, acceso al mar a través de una plataforma que permite el baño y grandes jardines.
Pero el gran aliciente es su gastronomía, basada en los productos portugueses tradicionales con sus magníficos pescados frescos del Atlántico y sus frutas y verduras. El chef ejecutivo responsable de la cocina tanto en el restaurante gourmet como en los diferentes espacios gastronómicos del hotel no es, curiosamente, portugués, sino nacido en Aix- en- Provence (Francia). Sinthon aterriza en Madeira en el año 98 tras una vasta experiencia en Francia en restaurantes de la talla de Rochegude o Joigny. En 2004 se incorpora como responsable de la cocina del hotel The Cliff Bay, donde consigue la primera estrella Michelin para la isla en el restaurante Il Gallo d´Oro. En esa línea de promoción basada en la gastronomía, The Cliff Bay se ha convertido en el impulsor de iniciativas culinarias de repercusión internacional como el festival gourmet Rota das Estrelas, que reúne a los grandes cocineros portugueses y de diversos rincones del mundo en unas jornadas gastronómicas que inician su gira en este lugar para luego desplazarse a los mejores hoteles y restaurantes del país. La fuerte vinculación con la culinaria local no deja de lado la importante vertiente vinícola. Tanto Madeira como todo Portugal son tierra de vino y esa realidad está muy patente en las extensas y bien elegidas listas de todos los restaurantes del hotel. Por supuesto, la cercanía con bodegas históricas elaboradoras de vino de Madeira convierte la experiencia de cata y degustación en un verdadero aprendizaje enológico, que permite conocer de cerca este peculiar vino blanco que envejece en grandes toneles en las plantas altas de la bodega en busca de altas temperaturas que permitan una crianza oxidativa rápida. Un mundo aparte que hace de este paraíso atlántico un lugar donde aprender, disfrutar y descansar.



