El Portal, en Alicante, nos deleita con un trabajo bien hecho

Sergio Sierra es además impulsor de algunos de los proyectos más exitosos de la ciudad de Alicante, combina su labor en este restaurante con sus tentáculos en el Bar Manero y El Singular para fanáticos del tapeo. “Cuando tenia 11 años veía cada mediodía a Arguiñano. En mi siguiente cumpleaños pedí un cuchillo cebollero…”. Así de claro se muestra Sergio Sierra cuando habla de su profesión. En su trayectoria, la clara influencia de Abraham García, al que quiere y admira como se demuestra en platos muy Viridiana, como su arenque marinado con guacamole: “Es el plato con el que todos los clientes deberían comenzar pues con él empezó todo”,  afirma. En Cuenllas conoció a Carlos Bosch y allí surgió el idilio empresarial. Sierra tiene las cosas claras y eso se refleja en su cocina, que se ha distanciado de la fusión, la sorpresa y el trampantojo para centrarse en el producto, la brasa y el sabor en un local de cocina non stop abierto de lunes a domingo.

Nos gusta

La sala, que se redecora cada seis meses a la vez que se cambia la carta, los cócteles, la música… todo se reinventa para que no aburra.

Siempre perfecto

Sus gambas rojas, elaboradas con un punto delicado de brasa o hervidas con agua de mar, y sus callos siempre acompañados con una copa de Krug.

Un plus

Su carta de vinos y la profesionalidad de Gregorio como sumiller, Sergio en sala y la coctelería loca de Dmitri. Sus tres ases en la manga.

Con alma

En su antebrazo tatuada una zanahoria que simboliza la recompensa a un largo camino. “Estoy donde quiero estar. Cocino con corazón, con cariño, poniéndolo todo. En El Portal nos dejamos llevar por el mercado, innovando día a día, queremos un sitio donde la gente quiera ir y no desee salir”.