Almuerzo campestre

Vámonos de picnic: ideas gastro para disfrutar al aire libre

Miércoles, 14 de Abril de 2021

El picnic ha llegado a nuestras vidas de nuevo. Los cierres hosteleros y los confinamientos hacen plantearse nuevas formas de ocio con la llegada del buen tiempo, y el picnic es una excelente idea para pasar una jornada fuera de casa. Teresa Álvarez

Sin duda, las idas y venidas, los cierres y aperturas y los ahora sí, ahora no, nos están llevando por nuevos y prometedores caminos a descubrir a la hora de organizar nuestro ocio gastronómico. Afortunadamente, tenemos una solución: el picnic.

 

Mientras los políticos se definen, los clientes combinamos con cariño las terrazas abiertas, las salas en mesas de cuatro o el boom del delivery con un buen vino a domicilio como el que ofrece Vinoselección.

 

Pero con el buen tiempo, lo que apetece es prepararse un plan sin horarios o restricciones; para ello, nada mejor que la nueva moda que ha venido seguro para quedarse, el picnic.

 

No hace falta irse muy lejos: un parque con buena explanada de pradera, una zona de mesas en algún rincón forestal o un área de barbacoas con un bar cercano para la sobremesa puede ser el lugar ideal para sentarse con los amigos (no más de seis, claro) y organizar un aperitivo, comida o merienda campestre lleno de atractivos y siempre con esos grandes vinos.

 

[Img #19188]Con la primavera instaurada en nuestras vidas y el campo más verde y frondoso que nunca, algunos proveedores han captado esta nueva tendencia y preparan cestas llenas de encanto como la de Dehesa de los Llanos, con su queso manchego artesano, sus nueces, su miel de lavanda y su vino tinto Cima Mazacruz 2016.

 

Si eres de los que lo quieres todo hecho, muchas son las bodegas y hoteles que han elegido estas experiencias campestres tipo picnic para dinamizar sus propuestas turísticas. Cepa 21 prepara rutas por la finca en bicicleta eléctrica con parada para degustar sus vinos en pleno viñedo, por supuesto, acompañados de un picoteo informal y mantel de cuadros. Bajo el nombre de wine&bikes y por 40 €, esta bodega ribereña ofrece una experiencia enoturística que puede realizarse en tres horas diferentes por día.

 

En definitiva, por tu cuenta, armado con una buena cesta llena de provisiones fáciles y ricas o con la ayuda de profesionales, el momento picnic gana adeptos y las posibilidades son infinitas a pesar de los cierres perimetrales.

 

 

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