Felices fiestas y Feliz Navidad, de todo el equipo de Sobremesa

Suenan campanas en algún rincón del casco antiguo de Cáceres. La luz, la familia, el frío, un bebé.

Una imagen captada de manera aparentemente espontánea desde el Arco de la Estrella que podría expresar perfectamente la estampa más clásica de una Nochebuena.


Es de nuevo Navidad. Detrás de esta celebración religiosa hay un sentimiento profano que pasea entre la caridad, el amor por los más allegados, la generosidad, … que convierte estas celebraciones en algo especial.

Parece que somos más personas y nos acercamos a los placeres mundanos más deliciosos sin remordimientos. Las mesas se convierten en homenajes a la vida a través de la comida y del vino y sin duda, en años inciertos como los que vivimos, es una buena vacuna para conseguir sonrisas. Imagen: Álvaro Fernández Prieto