Vendimia 2022

Cómo está yendo la vendimia en el viñedo español: primeras impresiones

Martes, 13 de Septiembre de 2022 Actualizada Viernes, 16 de Septiembre de 2022 a las 11:39:21 horas
Vendimia en Bodegas OtazuVendimia en Bodegas Otazu

La cosecha 2022 viene precedida por años que han sido muy cálidos, donde los efectos del cambio climático parecen estarse haciendo más presentes que nunca. Esta añada ha venido marcada por el adelanto en la fecha de recogida, las olas de calor y los terribles incendios que han arrasado campo y, también, viñedo. Raquel Pardo

“La vendimia 2022 ha estado marcada por las condiciones climatológicas no solo de este año, sino de los anteriores. Hace ya cuatro años que los datos arrojan una media de lluvias muy por debajo de lo que venía siendo habitual, unos 600 litros; ahora estamos en torno a 400 litros y la tierra no tiene reservas de agua suficientes”, comenta el presidente del Consejo Regulador de la DO Jerez, César Saldaña, quien añade que las olas de calor de julio y las altísimas temperaturas de los comienzos del verano han influido, sobre todo, en la maduración de los pagos de interior del Marco, donde la cosecha se ha adelantado hasta el 28 de julio, la primera que comienza en este mes desde que se tienen registros. El presidente explica que se siguen cogiendo uvas en el marco especialmente de la variedad px para los procesos de asoleo, aunque ya se puede estimar que la vendimia “será corta, de unos 44 millones de kilos de uva, lo que supone un 23,5% menos respecto a la de 2021, que también fue corta”; sin embargo, aclara, “la calidad es muy buena, el nivel de sanidad ha sido alto y el grado, en torno a 11%, es muy satisfactorio y supera los requerimientos mínimos exigidos por el consejo regulador”.

 

El productor jerezano Willy Pérez, de Bodegas Luis Pérez, confirma las estimaciones del presidente hablando de la dificultad de esa cosecha, aunque cree que es posible elaborar vinos de alta calidad con una selección minuciosa de las uvas. La disparidad en el estado de las uvas en las 7000 hectáreas del viñedo jerezano ha sumado dificultad a una cosecha ya de por sí complicada por el reparto del viñedo en distintos municipios y más de cien pagos. Según estimaciones del Consejo Regulador, la cantidad vendimiada este año dará para llenar el equivalente a 61 600 botas.

 

En Rioja también viene adelantada la vendimia, y a fecha siete de septiembre y según el último boletín de maduración de la Denominación de Origen Calificada, ese adelanto es generalizado y varía entre los cinco y los siete días sobre las previsiones y la campaña pasada. Se prevé que comience en unos días en las zonas de Rioja Alavesa y Alta, mientras que en Rioja Oriental, las blancas ya están entrando en bodega y en breve ser recogerán las tintas. Una de las preocupaciones en la zona será la acidez, que previsiblemente será baja en todas las zonas debido al calor intenso. "Es la más compleja y difícil de mi vida por lo extremo: mucho calor por el día, por la noche y nada de agua, lo que ha hecho que pequeñas diferencias entre viñas se hayan magnificado ahora", define el enólogo Tao Platón, director técnico de Península Vinicultores, que opera en Rioja Alavesa; Platón repasa los rendimientos muy bajos, el pequeño tamaño de las bayas en los blancos, lo que intensifica la labor de control. Pero lo que más destaca es que "no hay plan" respecto al orden de la vendimia respecto a otros años y extiende esta irregularidad a lo que ha escuchado de otras zonas: "He visto vendimiar verdejos antes que sauvignon blanc y Toro a la vez que Ribera y nosotros hemos vendimiado gracianos antes que tempranillos plantados en el mismo sitio", afirma. sobre Rioja Alavesa, considera que "hay sitios parados, otros que no" y habla de hasta 21 días de adelanto, por lo que la conclusión es que es muy dura porque obliga a tomar decisiones casi al minuto. Esto se suma a las limitaciones que provoca, continúa Platón, la escasez de mano de obra, porque condiciona los márgenes de maniobra para sacar adelante la cosecha.

 

Las lluvias que han ido cayendo en Rias Baixas han marcado un comienzo de vendimia en fechas “normales” respecto a los últimos años, en los primeros días de septiembre. En pleno ecuador, se han recogido ya en torno a 21 millones de kilos, algo más de la mitad de lo que se espera vendimiar en total, y aunque las lluvias pueden hacer cambiar las previsiones respecto a las mermas debidas al calor, la marcha de la cosecha es positiva, según fuentes del Consejo Regulador. El estado sanitario es bueno y no hay, hasta el momento, especial preocupación por enfermedades de la vid.

 

En otra zona de blancos más continental como Rueda la vendimia empezó el 16 de agosto, la más temprana de los últimos siete años, que comenzó con la recogida de las variedades sauvignon blanc y chardonnay, de ciclo más corto que la variedad reina de la Denominación, la verdejo. El calor y la sequía han afectado a la maduración de las uvas y también ha determinado cierta tranquilidad frente a las enfermedades, por lo que desde el Consejo se prevén vinos de “máxima calidad”, según sus fuentes. El presidente de la DO, Carlos Yllera, considera que “algo de lluvia favorecería al viñedo” aunque matiza que “la cantidad y fuerza con la que caiga la lluvia podría ser perjudicial”. En esta región es habitual la vendimia mecanizada y nocturna, en este caso, para aprovechar la bajada de los termómetros y preservar a la uva de oxidaciones no deseadas.

 

También ha sido temprana la vendimia en Navarra, que ha empezado a mediados de agosto con la recogida de la chardonnay y la moscatel de grano menudo en pueblos de la Ribera Baja y Alta. El adelanto ha sido fijado en torno una semana respecto a las fechas habituales y se prevé recoger 68 millones de uvas, un 17% más que en la de 2021, en parte, estiman desde el Consejo Regulador, porque la recogida de la garnacha vuelve a sus niveles de producción habituales tras una importante merma el año pasado. También se habla de buen estado sanitario y el presidente, David Palacios, considera que “gracias al saber hacer de las bodegas y viticultores se recoge la uva en su momento óptimo y en un estado sanitario ideal para elaborar una gran añada de vinos”. La gerente del consejo, Elena Arraiza, destaca el calor y la sequía como causantes de un retraso aproximado de diez días sobre las fechas habituales de recogida, y también el hecho de que "en tan solo 100 kms tenemos desierto y bosque frondoso, y eso se manifiesta en el campo con una vendimia escalonada en zonas del norte y del sur, sin embargo, este año esa diferencia no se ha notado" y las labores de recogida han sido casi simultáneas en las zonas de la Ribera Baja y la Ribera Alta.

 

En Navarra también aunque con DOP propia, Otazu ha comenzado a cosechar su vendimia más temprana desde que se fundó en 1994, una semana antes de lo que suele ser habitual y con la previsión de obtener una cantidad superior de uvas respecto a 2021. Esta será para la bodega la primera que elabora el nuevo director técnico de la bodega, Enrique Basarte, conocido por su brillante trayectoria en Domaines Lupier, proyecto propio que fundó y dirigía junto a su pareja, Elisa Úcar.

 

En Ribera del Duero tan solo hay, a día de hoy, datos provisionales que informan del comienzo de la recogida de uva el 30 de agosto, y de momento, se han recogido poco más de dos millones de kilos. No muy lejos de la región en la vecina Toro, la vendimia comenzó el 24 de agosto, con previsiones de irregularidad, según afirma el presidente del Consejo Regulador, Felipe Nalda, aunque la calidad que estima es “excepcional”.

 

En definitiva, el calor ha ocupado un papel esencial en el adelanto generalizado de la vendimia en las principales zonas vitivinícolas españolas y en la dificultad de sacar adelante uvas con una calidad regular, lo que hace especialmente relevante el saber hacer de los viticultores y bodegueros por lograr, pese a las dificultades, los mejores vinos posibles. No hay que olvidarse tampoco de que ese mismo calor, y el abandono rural, han agravado también la virulencia de los incendios forestales que han arrasado más de 200 000 hectáreas de bosques entre los que también ha habido viñedos víctimas del fuego en distintos puntos del país, desde Zamora a Gredos o Navarra, entre otras regiones, por lo que, sin duda, la de 2022 también será recordada por estas trágicas circunstancias, tan dañinas para los ecosistemas.

 

 

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.