Éxitos en La Rioja
Fernando Meruelo
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Fernando Meruelo tenía una vocación clara desde muy joven. Estudió Agrónomos y en pocos años inició su proyecto personal: la bodega Heredad de Baroja, en Rioja Alavesa, donde puso en marcha el multipremiado tempranillo Lar de Paula. Teresa Álvarez
Para este segundo proyecto Fernando se alió a su amigo Félix Revuelta, empresario y creador del grupo Nature House, además de gran apasionado del vino. Esta segunda bodega se destinó desde el principio a la elaboración de vinos de corte más moderno que pudiese complementar la ya amplia gama de Heredad de Baroja y aprovechar la buena distribución y logística internacional que disponía.
Corría 2004 y Lar de Paula (rendido tributo de padre dedicado a su hija Paula) se convirtió en una realidad que ha conseguido durante los siete años siguientes situar sus tempranillos en los mejores mercados internacionales, exportando más del 45% de la producción que asciende en su totalidad a 1.400.000 botellas. Alemania, es hoy su mejor mercado y la mayor satisfacción de Fernando, que su hija Patricia se implique en el proyecto liderando el departamento comercial de exportación.
Buena muestra de la línea moderna seguida por la bodega la tenemos en los ensayos y proyectos que ha liderado, como el estudio de robles junto a la empresa de tonelería Quercus. A raíz de estos experimentos, los vinos de la casa se han beneficiado de un tipo de tostado, Côte d’Or, conseguido a partir de un riguroso sistema, el llamado rotativo horizontal (TRH).
La mejor arma para abrir mercados: los múltiples premios y reconocimientos que logran sus vinos, entre los que están las tres medallas de oro recibidas en el International Wine Challenge London 2010 en las modalidades de Mejor Tempranillo, Mejor Vino de Rioja Alavesa y Mejor Tinto Español para su Lar de Paula Cepas Viejas 2005. La colección de galardones internacionales obtenidos por la bodega pasa por otros prestigiados concursos como el Decanter Awards (Medalla de Bronce para el blanco fermentado en barrica de la casa), el Japan Wine Challenge (Plata para Lar de Paula crianza) o el Mundus Vini Düsseldorf.
Hoy Fernando observa con satisfacción sus logros, sus vinos y sus medallas y se permite escapar cada fin de semana a los mejores cotos para disfrutar de su principal afición, la caza.
