Luto en el Penedès
Muere Antoni Mata Casanovas, presidente de Recaredo

El productor y presidente de la casa de espumosos falleció ayer a los 81 años de edad. Pasará a la historia del vino como uno de los más firmes defensores del espumoso de terruño. Raquel Pardo
“Veníamos de una familia de alfareros, y empezamos a elaborar nuestros vinos espumosos con las uvas provenientes de los viñedos de nuestros abuelos maternos... A medida que observábamos la gran conexión entre el cultivo de viña y los cavas Brut Nature y de larga crianza que a nosotros nos gustaban, más nos animamos a tratar de encontrar las mejores fincas del Penedès”. Quien así se expresaba es Antoni Mata Casanovas, uno de los artífices de la defensa del espumoso del Penedès más apegado al terruño, presidente de Recaredo, que falleció ayer a los 81 años de edad.
Nacido en 1942 en la casa familiar, Can Credo de Sant Sadurní d’Anoia, desde muy pequeño ayudaba a su padre en la bodega, removiendo levaduras desde lo alto de un bocoy con apenas siete años.
Como segunda generación de elaboradores en Recaredo, Mata procuró que el proyecto avanzara con una visión global del negocio, informa el comunicado de la bodega, y se ocupó de la gestión, creatividad, representación y la enología de la casa debido a que tenía mucho tesón y afán de superación.
“Es una gran pérdida”, comenta el presidente de Juvé& Camps, Joan Juvé Santacana, amigo de Mata desde su infancia y con quien compartió celebraciones, siendo, ambos, testigos y protagonistas de la evolución del espumoso en el Penedès desde sus respectivas bodegas. “Se nos ha ido un verdadero amigo desde nuestra más tierna infancia”, prosigue Juvé, quien describe a Mata como “un hombre honesto, inteligente, una bellísima persona y enamorado de su profesión” para concluir, apenado, que ha sido “uno de los bodegueros que más ha hecho y trabajado por los espumosos de calidad de este país. Le echaremos mucho en falta”.
En Recaredo, Mata fue configurando un modelo de negocio basado en el viñedo propio y esto le convirtió en un impulsor de la elaboración de espumosos de terroir, uno de cuyos máximos exponentes fue la marca Turó D’En Mota, que precisamente celebró sus primeras veinticinco vendimias el pasado mes de octubre con una cata magistral en el Celler de Can Roca. Allí se lanzó también la última novedad de la casa, Enoteca de Turó d’En Mota, un espumoso que atesora 23 años de crianza en rima y que viene a ser la culminación del propósito de Mata Casanovas, quien pudo vivir en persona la celebración ante un numeroso grupo de profesionales del vino que aplaudieron su labor a lo largo de todos estos años de profesión y el emocionado agradecimiento de su hijo, Ton Mata, tercera generación de la bodega y al frente de la casa como director general, quien ha heredado de su padre la vocación por la viticultura puesta al servicio del espumoso.
Mata recorrió diversos puntos de España para formarse en enología y viticultura y mantuvo una mente abierta a la evolución, pero con la idea de autenticidad como bandera. Quiso que sus espumosos (primero bajo la DO Cava y después encabezando el movimiento y marca de calidad Corpinnat tras su salida de la Denominación, en 2019 y junto a otros productores que no se veían representados por su reglamento) mantuvieran el tapón de corcho durante las crianzas y reforzó la apuesta por la xarel·lo como variedad de alto valor para los largos reposos en botella, clave para elaborar espumosos de talla mundial. Apostó por el estilo brut nature y la creación de vinos con un estilo propio y ajenos a modas.
Desde la bodega se afirma que Mata “ha ejercido profesionalmente aquello que le apasionaba y ha tratado de trasmitirlo desde la generosidad y la sabiduría humilde”, ya que “pertenece a una generación educada en la austeridad del tiempo que le tocó vivir”, que trabajaba “sin mirar el reloj” y con el compromiso por la excelencia.
El espumoso del Penedès vuelve a estar de luto con su marcha, ya que hace tan solo tres meses, el pasado 4 de agosto, murió otra de sus figuras clave, el vicepresidente de Gramona, Xavier Gramona, quien junto a Recaredo impulsó la creación de Corpinnat como marca de calidad diferenciada de la DO Cava.