La crítica de vino más influyente del mundo
Jancis Robinson, la testigo sabia del vino mundial

Master of Wine, escritora vinícola y fundadora de JancisRobinson.com, jurado de la Copa Jerez 2023, saca la quinta edición de una de las obras cumbre del vino, “The Oxford Companion to Wine” y ha inspirado la creación de Old Vine Registry, compendio mundial de viñas viejas. Raquel Pardo. Imagen: Álvaro Fernández Prieto
Jancis Robinson, una de las críticas y escritoras vitivinícolas más influyentes del mundo, pasó en octubre por Jerez para formar parte del jurado que alzó como ganadores a los representantes de Dinamarca, el cocinero Allan Schultz y el sumiller Alexander Berntsen, del restaurante Parsley Salon. Robinson fue testigo de la revolución de los vinos jerezanos en los años 70, cuando las ventas en Reino Unido alcanzaron récords inéditos. Ahora, cuando la siguiente revolución mira hacia los suelos y el terroir, la británica observa que hay una tendencia completamente distinta, ya que “preocupa la calidad y la especificidad, mientras que en aquellos años todo giraba en torno a la cantidad y la globalización”, comenta, y se confiesa “encantada de haber pasado tiempo en Jerez con muchos de los fascinantes productores de los nuevos jereces no fortificados”, un desarrollo “realmente saludable” para la región y que, en su opinión, está inspirado no solo en la geografía, sino también en su pasado histórico. La MW acaba de estrenar también la quinta edición de uno de los libros de consulta vinícola más completo que existe, The Oxford Companion to Wine, un compendio de más de 4000 entradas que incluye 300 nuevas incorporaciones y en la que han participado más de 250 expertos. Preguntada por las novedades del panorama vitivinícola español, responde que cada una de las entradas ha sido cuidadosamente analizada y actualizada en lo necesario bajo la supervisión de Tara Q. Thomas, redactora jefe del portal JancisRobinson.com, y la editora Julia Harding, responsable de la edición anterior, lanzada en 2015. Robinson revela que, entre las nuevas altas se incluyen términos como Corpinnat, Lebrija, maturana tinta, Familia Palacios, pie franco, Valles de Benavente, Valtiendas o vino de Tea que, si bien, comenta, pueden parecer menores, se suman a otras adiciones “sustanciales” que incluía la cuarta edición. Entre las actualizaciones generales se pueden leer conceptos como influencer, Master Sommelier, celebrity wine o unicorn wine y otros términos que han ido tomando relevancia en el sector del vino mundial en estos ocho años. Jancis Robinson forma parte, desde 2005, del Royal Household Wine Committee, comité vinícola de la Casa Real británica, una agrupación que se encarga de adquirir en torno a 5000 botellas anuales de vino que se servirán en los más de 300 eventos celebrados en el palacio de Buckingham y el castillo de Windsor. Como ella misma reveló en un artículo en su web publicado en 2011, el comité suele seleccionar vinos espumosos que se adquieren a precio medio “considerablemente inferior al de cualquier oferta especial de supermercado que yo haya conocido” y vinos modestos para grandes recepciones, como burdeos genéricos o sauvignon blancs de Nueva Zelanda. En la primera cata que el equipo realizó para el rey Carlos tras la muerte de Isabel II, se probaron 16 vinos de Pomerol y 35 espumosos ingleses que forman parte de Wine GB, la asociación mercantil de productores de vino de Inglaterra, que preside desde 2011 la reina consorte, Camilla. La escritora británica, incansable, ha impulsado desde hace más de una década el proyecto Old Vines Registry, un registro mundial del patrimonio de viña vieja que comenzó a elaborar junto a una de las redactoras del portal JancisRobinson.com, Tamlyn Currin, con el convencimiento de que el viñedo viejo es un elemento importante de la cultura, además de encontrarse en el origen de vinos singulares. El registro refleja 409 viñedos españoles de zonas como Empordà, Toro, Mallorca, El Hierro, Tenerife o la Axarquía malagueña, aunque Robinson considera que sería una gran idea si España enfatizara este patrimonio de viñas viejas, “particularmente, pero no en exclusiva, de garnacha”, variedad de la que se considera fan. Añade que “durante años no he podido entender por qué se ha puesto tanto énfasis en la tempranillo y tan poco en la garnacha” y urge a los productores y consumidores a echar un vistazo a la web de Old Vine Registry e inscribir viñas viejas que no están en el listado.