Una mina de viñedo viejo
El vino de la semana: Fuentenebro 2021

El vino de esta semana es un tinto que supone una mirada con otros ojos a una zona vitivinícola tradicional de la Ribera del Duero y que, junto a otros proyectos que también parten de viñedos en esa misma localización, pone de relieve su alto valor patrimonial para el vino presente… y futuro. Raquel Pardo
Fuentenebro no tiene bar. Al menos, según la información más reciente aparecida en la página web de su Ayuntamiento, que ha publicado una oferta de licitación para abrir uno y cubrir, así, “el vacío de bar que existe desde hace un año, demandado por la mayoría de los vecinos, y reforzar así la vida social del pueblo”. La idea, explica el texto del organismo, es que haya en un futuro un bar municipal, pero la actualidad es así de severa y en Fuentenebro no hay un sitio donde tomarse un café en una barra y hablar del partido de ayer, la situación política o la boda de tal o cual noble. Sí hay, sin embargo, un restaurante, con el revelador nombre de El Rincón del Pasado, donde la propietaria, Begoña, ofrece desde celebraciones de cumpleaños a catas y visitas guiadas a las bodegas subterráneas de la localidad. Se ha empeñado en preservar la memoria de Fuentenebro manteniendo vivas sus tradiciones y costumbres, además de su gastronomía.
Pero, siendo un lugar de reunión no es, claro, un bar, bar.
Y es que este pequeño pueblo burgalés de 148 habitantes es un ejemplo de esos territorios amenazados seriamente por la despoblación, pese a haber contado en el pasado con fuentes que parecían dotar de riqueza a sus habitantes. En Fuentenebro había una mina que en los 60 explotó yacimientos de cuarzo, feldespato y mica y que terminó cerrando. Aunque hubo intentos de volver a abrirla a principios de este siglo, según informaba en 2016 el Diario de Burgos, la actividad minera no volvió al pueblo.
Lo que sí ha vuelto, y parece que con fuerza, es el interés por su patrimonio vitícola, en muchos casos, octogenario y prefiloxérico. Fuentenebro es una pequeña mina de viña vieja sobre suelos con esos mismos minerales y un alto componente de caliza y hierro, que, junto a su altura, superior a los 900 metros, hace su entorno un enclave tremendamente atractivo en tiempos de cambio climático.
Hasta allí han llegado bodegas de las cercanías para encontrarse con un tesoro por explotar y explorar para dar forma a nuevos perfiles de vinos que conservan una preciada frescura y arrojan una finura natural, procedente de esos viñedos que han sido testigos mudos del pasar del tiempo en este pueblo sin bar.
Fuentenebro es, pues, reclamo de bodegas con visión como Pago de Carraovejas con el proyecto Milsetentayseis, que alude a la altitud de esos viñedos, o de Pago de los Capellanes con “Un sueño en las alturas”, su último tinto procedente de viñas en esta zona.
Fuentenebro es también el nombre de nuestro vino de la semana, elaborado por Señorío de Nava, bodega fundada en 1986 en Nava de Roa por Antonio Vázquez y dirigida por su hijo, del mismo nombre (propietarios de San Cobate, también en la Ribera del Duero, y de la leonesa Vile La Finca) que da un salto con este tinto de la fresca añada de 2021 y que se estrena tras una búsqueda de viñedo que se alargó hasta tres años. Es un vino sedoso, mineral, con fruta roja y silvestre que se desliza en la boca y suma un atractivo líquido más a los que ya atesoraba este rincón burgalés. La idea, se comenta en el dossier informativo sobre el origen y las características del vino, es “luchar por la perfección”.
Sería perfecto, pues, si hubiera un bar en el pueblo donde descorcharse un buen Fuentenebro, pero…
PVP: 16€