Ribeiro baila este sábado al Son de Viño

El próximo sábado la playa de la Barrosa del Náutico de San Vicente Do Mar, en O Grove (Pontevedra), en pleno territorio de Rias Baixas, será el escenario del primer festival de música y vino gallego que se crea en la comunidad autónoma, Son de Viño, una iniciativa del Consejo Regulador de Vinos de Ribeiro para acercar el vino a la cultura y a un público amplio, muchas veces desconocedor de la auténtica calidad de estos vinos gallegos. El Ribeiro se lleva por primera vez a la costa, a una playa emblemática por ser templo musical cada verano y donde el consumo habitual es más de gin tonics o cerveza. El reto, pues, es grande, pero desde la organización se confía en que los blancos y tintos de Ribeiro sepan conquistar al más escéptico en un escenario como este.

Desde mediodía y hasta la madrugada del domingo, las arenas de la Barrosa se llenarán de pies bailando a ritmo de las actuaciones de Soledad Vélez, Txetxu Altube (Los Madison), Caxade, Modelo de Respuesta Polar, Fabián, La Habitación Roja y el dj Manpop, que pondrá el cierre con su sesión indie. Todas ellas, como el ribeiro, se estrenan en este escenario. Entre medias,catas armonizadas con gastronomía (no solo con música y vino aguanta uno un festival entero) y algunas de las bodegas más modernas de la denominación, que no han dudado en sumarse a esta primera iniciativa de lifting enológico a través de la música:Cuñas Davia (ganador del premio al mejor vino de Ribeiro en 2013), Ramón Do Casar, Viña Meín, Campante, Coto de Gomariz y Viña Costeira. Con ellos se podrán probar sus vinos de bandera, sobre todo blancos (en verano, es lo que pide el cuerpo) y alguno de los tintos que están empezando a ser un destello en la Denominación vinícola más antigua de Galicia. Cada bodega y cada grupo irán emparejados tras un minucioso análisis para armonizar, literalmente, música y vino. El Consejo Regulador abrirá el programa con la presentación de su nueva imagen y su vino corporativo, escogido por saber expresar la identidad general de los diferentes ribeiros. 

Las entradas ya están a la venta para esta oportunidad de descubrir que el vino puede salir de las mesas y consumirse en forma de copa mientras se escucha una banda sonar y o se meten los pies en las aguas de una playa.