Noche toledana
Gala Michelin 2023, la noche de las estrellas
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Son los Oscar de la gastronomía, que despiertan un interés general de los foodies pero también de todos aquellos que buscan buenos restaurantes para darse un homenaje de vez en cuando. Nos permiten recorrer toda la geografía española buscando sabores nuevos y nos despiertan inquietudes viajeras a rincones que jamás hubiésemos incorporado a nuestra lista de destinos. Un año más la gala Michelin confirma el buen estado de salud de la gastronomía ibérica. Mayte Lapresta Imágenes: Álvaro Fernández Prieto
Hay nervios contenidos. Los que están intuyen que algo puede suceder. Se hacen apuestas y muchos preparan las agendas de reservas por si la estrella cae en su establecimiento. Hay que ser sinceros y las Michelin son indiscutiblemente las reinas del reconocimiento gourmet. Para esos pequeños restauradores se convierte en un sueño hecho realidad. Años de lucha, de aprendizaje, de horarios locos que no permiten vida familiar. Y apuestas económicas arriesgadas y valientes que no siempre obtienen el resultado esperado. No podemos afirmar que una estrella signifique la consagración definitiva de un lugar, pero sin duda lo sitúa en el mapa. Lo hace visible. Lo convierte en pequeño santuario del gusto. Esta año 29 restaurantes han inaugurado su camino al paraíso. Luego están aquellos que revalidan el título, suspirando ante todo un año de inquietud. Y por supuesto los maestros. Los que ascienden a la liga de campeones, con dos estrellas en su poder como el proyecto en Madrid de Dacosta que ha convertido al Ritz en el templo gastronómico que debía haber sido siempre, el precioso restaurante Pepe Vieira de Xosé Cannas en Pontevedra o los encantadores hermanos Padrón en su propuesta canaria de Adeje. Por último, los dioses, a los que se suman el grandísimo Toño Pérez (y José Polo porque esto es un tándem) de Atrio y los hermanos Torres. Ya son 13 los triestrellados nacionales. Pocos me parecen, como me sorprende la ausencia femenina, sin duda injustificada. Todavía estamos lejos de triunfos como la predecible Francia pero también de Japón, que posee 23 en su haber.
Talento a raudales, buen humor, compañerismo, despliegue mediático y por supuesto un trabajo detrás ingente por parte de los inspectores y de los organizadores de una noche que, como cada año, hace historia. Ahora, a preparar el monedero para conocer a los desconocidos, felicitar a los amigos y celebrar todo lo que merezca la pena acompañados de la magia que solo la cocina puede proporcionarnos.